“Otros vendrán que buenos los harán”, el refranero popular
siempre ha sido para mi una fuente de inspiración para todo tipo de referencias, silogismos,
sofismas y demás figuras del lenguaje y el pensamiento; también es cierto que “hombre refranero,
hombre puñetero, pero este es otro tema.
La firmeza con la que gobernó Margaret Thatcher en
Inglaterra durante la década de los 80, hizo que se la conociera como la Dama
de Hierro, impuso su ley y criterio en el país e intento hacer lo mismo en el
entorno europeo, pero creo recordar que no llego al nivel de Ángela Merkel.
Hace uno días me desayuno con este titular , “Los líderes
mundiales presionan a Merkel para impedir otra recesión”, dentro de ese grupo
estaban el resto de gobernantes europeos, Japón, Rusia, y…………….!Estados
Unidos!, si amigos, Obama también sugiere, presiona, ansia, anhela una Europa más
fuerte y en crecimiento; está claro que lo que temen es que la infección se
traspase a su país y sobre todo perder un mercado fundamental como es el
europeo.
Aun así, la idea de que medio mundo esté intentando convencer a la Merkel para que
afloje me tiene perplejo, está claro que no nos enfrentamos a una Dama de
Hierro al uso, no tiene maneras de dama y su presencia y sus declaraciones
hacen que apueste mas por una especie de hibrido creado con diferentes retazos
como la Señorita Rotenmeyer, el ClinEastwood de Sargento de Hierro y nuestro
Paco Martinez Soria en “Don erre que erre”.
Apoyando a la Merkel de forma tenaz en esta política de -sostenella
y no enmendella-, están algunos países nórdicos y ese curioso país que está por
debajo del nivel del mar, donde fuman hierba en las cafeterías y las chicas se
muestran en los escaparates.
Con esta infantería ( que en el fondo no la necesita ) la Merkel se ha lanzado como un a posesa a la cruzada del déficit y la ortodoxia fiscal “per tuti”, quien caiga en el camino parece poco relevante, si al final del proceso hay 4 o 5 países que se hunden en la miseria capitalista, da lo mismo, siempre que hayan cumplido con el objetivo de déficit, ya en los próximos 50 años se irán recuperando.
Para ser Alemania un país rescatado, rescatado en la
postguerra gracias al Plan Marshall, ahora parece olvidarse de esa situación y
propone una ayuda mediante el sistema de palo y zanahoria, los países que están
recibiendo zanahoria, también tienen en sus espaldas las marcas de los palos;
digo yo que una actitud tan altiva como la de nuestra vecina Merkel no es buena
para crear lazos de amistad entre países; desde luego si fuera Griego ya habría
borrado de mi Facebook a todos los amigos alemanes y amigos de amigos alemanes
que tuviera.
La humillación a la que los países vencedores de la 1ª
Guerra Mundial sometieron a Alemania fue el caldo de cultivo del Nazismo y el
odio a Europa, esperemos que Griegos, Irlandeses y Portugueses no desarrollen
este sentimiento, pero ganas seguro que no les falta.
Mientras pasa todo esto, España está metida en la estéril polémica
de si son galgos o podencos con el tema semántico del rescate y no nos damos
cuenta de ya nos han tallado, nos han pesado, tenemos el petate y confirmado
destino:
El Pelotón de los Torpes, al mando del Sargento Merkel.
¡!SEÑOR, SI SEÑOR!!
